lunes, 12 de agosto de 2019

ESCITALOPRAM

"Es un comprimido pequeño, blanco, ovalado, divisible. No crea ni transforma; interpreta. Lo que era definitivo lo convierte en pasajero; lo que era inevitable lo vuelve contingente. Proporciona una interpretación de la vida: menos rica, más artifical, e impregnada de cierta rigidez. No procura ninguna forma de felicidad, ni siquiera un verdadero alivio, su acción es de otra índole: transformando la vida en una sucesión de formalidales, permite engañar. Por lo tanto, ayuda a los hombres a vivir, o al menos a no morir..., durante un tiempo”. (De la novela "Serotonina", de Michael Houellebecq).


Si tomo "Escitalopram"*,
en lo de Onán causo baja
-que es más bien una ventaja-
y las ganas se me van.

La musa se pone terca
con el antidepresivo,
hace un mes que solo escribo
la lista para "Alimerka"**.

La química, sin embargo,
va bien para no pensar;
vivir y tener que estar
ya no sabe tan amargo.

Que le den a la ansiedad,
colocado de pastillas
ni sueños ni pesadillas
vienen a alterar mi paz.

Y, no obstante, tengo dudas,
¡todo es tan artificial...!
Estar bien es no estar mal,
con las ilusiones mudas.


* "Escitalopram": nombre comercial de un antidepresivo y ansiolítico.
** "Alimerka": nombre de un supermercado.